Dieta para hígado graso: alimentos permitidos y prohibidos

Cuando se tiene hígado graso, también llamado esteatosis hepática, es importante realizar cambios en los hábitos alimentarios, ya que es una de las formas de tratar y mejorar los síntomas como pérdida de apetito, dolor en el lado derecho de abdomen y barriga hinchada.

El hígado graso es producto de malos hábitos alimentarios, que por lo general está asociado al exceso de peso y a enfermedades como la prediabetes, diabetes, colesterol alto, triglicéridos altos e hipertensión. Con la dieta el objetivo que se busca es disminuir la grasa acumulada a nivel abdominal y en el hígado progresivamente, evitando que esta empeore.

Alimentos permitidos

Una de las recomendaciones principales para ir eliminando la grasa acumulada en el hígado es disminuir de peso (en caso tenga sobrepeso), debido a que cuando se pierde por lo menos un 10% del peso actual, los niveles de las enzimas del hígado mejoran y favorecen la eliminación de la grasa acumulada. Por ello los alimentos que pueden incluirse en la dieta son:

  • Consumir entre 4 a 5 porciones entre frutas y vegetales al día como calabacín, berenjena, lechuga, tomate, cebolla, zanahoria, manzana, pera, durazno, papaya, fresas, moras, frambuesas, naranja, limón, ciruelas;
  • Aumentar el consumo de alimentos ricos en fibras como arroz, pan, cereales y pasta integral;
  • Carnes blancas como pollo y pavo sin piel y pescados;
  • Leche y yogur descremados;
  • Huevos y quesos blancos bajos en grasa.

El tipo de grasa que puede consumirse cuando se tiene hígado graso son las grasas poliinsaturadas, monoinsaturadas y los alimentos ricos en omega-3. Algunos ejemplos de estos tipos de grasa son el aceite de oliva y de linaza crudo, el aguacate, las semillas como las de chía o girasol, frutos secos como cacahuate, nueces, almendras y pescados como el salmón, la trucha, las sardinas y caballa.

Alimentos que no deben consumirse

Los alimentos que no deben consumirse para evitar la acumulación de grasa en el hígado son:

  • Carnes rojas con alto contenido de grasa;
  • Quesos amarillos, queso crema, chocolate, galletas de mantequilla, productos de pastelería en general;
  • Embutidos salchichas, mortadela, tocino, chorizo, jamón;
  • Salsas como mayonesa, ketchup y otras en general;
  • Mantequilla, margarina, manteca;
  • Cubitos de carne o de pollo;
  • Azúcar de mesa o alimentos procesados e industrializados que lo contengan como tortas, galletas, ponquecitos, jugos pasteurizados, refrescos;
  • Evitar comidas rápidas o congeladas listas para consumir como lasaña, nuggets o pizzas;
  • Evitar arroz, pasta y pan blanco;
  • Bebidas alcohólicas.

En algunas personas, el hígado graso puede causar dolor abdominal, por lo que consumir alimentos que producen gases, como los granos o el brócoli, puede empeorar este malestar, sin embargo esto dependerá de la persona.

Menú ejemplo para el hígado graso

En la tabla a continuación se muestra un menú ejemplo de 3 días de una dieta para el hígado graso:

Comidas principales Día 1 Día 2 Día 3
Desayuno 2 rebanadas de pan integral + 2 rebanadas de queso blanco + 1 naranja 1 taza de yogur descremado con cereal integral + 1 pera Café con leche descremada + 2 huevos revueltos con 3 tostadas integrales + 1 manzana
Merienda de la mañana 1 durazno mediano 2 tostadas integrales con 2 cucharadas de queso ricotta 1 banana espolvoreada con canela
Almuerzo/Cena 90 grs Pechuga de pollo sin piel a la plancha con arroz integral + Ensalada de lechuga, zanahoria y maíz aderezado con unas gotas de limón y 1 cdta de aceite de oliva 1 filé de Merluza al horno con puré de calabaza natural + 1 taza de ensalada de remolacha con zanahoria cocida aderezada con unas gotas de limón, orégano y 1 cdta de aceite de linaza 90 grs de pechuga de pavo cortadas en tiras + 1 wrap integral con ensalada de tomate, lechuga y cebolla, aderezada con limón y una cucharadita de aceite de oliva
Merienda de la tarde 1 taza de gelatina sin azúcar 1 manzana con 1 cda de mantequilla de cacahuate 1 yogur descremado con frutas picadas y 1cda de avena en hojuelas

 

Otras recomendaciones

Es importante la ingesta de agua a lo largo del día, debiendo tomar por lo menos 2 litros. También es posible ingerir tés que favorezcan la limpieza del hígado para eliminar las toxinas que se encuentran acumuladas, algunos de estos tés son el de cardo mariano, milenramas o de alcachofa, los cuales deben ser ingeridos sin azúcar.

En caso que la persona no beba mucha agua, puede adicionarle limón para darle sabor, debido a que es rico en vitamina C y antioxidantes que ayudan a desintoxicar el hígado. Además de esto, se deben realizar 3 comidas principales y 2 o 3 meriendas al día, evitando saltarse las comidas.

En cuanto a la disminución de peso, ésta debe ser gradual a través de una alimentación equilibrada y de la realización de actividad física regular, por lo menos 3 veces por semana durante 1 hora.

Es importante que para la dieta del hígado graso los alimentos se prepararen de forma sencilla, evitando el uso de condimentos, y de preferencia deben ser cocinados a la plancha, al vapor o al horno.

Si se siguen correctamente estas recomendaciones, será posible ir eliminando la grasa acumulada a nivel abdominal y del interior del hígado en aproximadamente 2 meses, sin embargo, se recomienda consultar un nutricionista para que realice una evaluación y elabore un plan nutricional adecuado a las necesidades del individuo.