Mira bien tus manos, ¡te dicen mucho sobre tu salud!
Tu cuerpo es una gran máquina que te dice todo sobre el estado de tu salud. ¡Todo lo que tienes que hacer es aprender a lucir bien! Por ejemplo, tus manos son un indicador importante de lo que está sucediendo en tu cuerpo: te dan todo tipo de señales que nunca debes ignorar.
¿A qué debes prestar atención? A continuación, se presentan varias formas en que tus manos te dicen algo sobre tu salud que normalmente no considerarías.
Hormigueo en manos y dedos
Esto puede significar que no obtienes suficientes vitaminas B1, B6, B12 y/o vitamina E. Presta atención a tu dieta. Si notas esta sensación en tus manos o pies, introduce suplementos dietéticos en tu rutina diaria. En caso de duda, visita a tu médico.
Yemas de los dedos azuladas
Esto indica mala circulación o bajos niveles de oxígeno en la sangre. A menudo no es dañino, pero si se acompaña de neumonía, puede ser un signo de enfermedad pulmonar. Siempre llama al médico si te preocupa.
Sensación de entumecimiento en las puntas de los dedos
Esto también puede indicar problemas con la circulación sanguínea. Sin embargo, también puede ser el resultado de un nervio pinzado o una enfermedad cardiovascular.
Dedos entumecidos blancos o azules
Esto puede ser un signo de la enfermedad de Buerger. Esta condición conduce a una inflamación creciente en los vasos sanguíneos pequeños y medianos. A menudo es el resultado de fumar mucho.
Lecho ungueal pálido
Si presionas el lecho ungueal por un tiempo, se volverá blanco, pero luego rosado nuevamente. Esto es normal. Sin embargo, si el lecho de la uña permanece blanco, esto puede ser un signo de deficiencia de hierro.
Manos temblorosas
Primero, presta atención a tu consumo de cafeína y al nivel de estrés. Demasiado estrés y café pueden causar vibraciones en tus manos. ¿Esto no lo explica? Luego visita a tu médico. Puede ser una señal temprana de Parkinson.
Palmas rojas y manchadas
Si esto persiste, ve al médico. Puede ser un signo temprano de una enfermedad hepática.
Dedos hinchados
Esto suele ser el resultado de un consumo excesivo de sal. Trata de comer menos y ver si te ayuda a retener menos agua.
Palmas sudorosas
Esto puede ser el resultado de una glándula tiroidea hiperactiva. Si lo padeces con frecuencia, llama a tu médico.